El Presidente de Bolivia, Evo Morales, arribó el martes al Aeropuerto Internacional Benito Juárez de la Ciudad de México, donde agradeció al gobierno de Manuel López Obrador por salvarle la vida ante el riesgo que correría tras el golpe de Estado que caracterizó como “cívico-político-policial”.
“Muchas gracias por salvarme la vida (…) gracias México y a sus autoridades, mientras tenga la vida seguiremos en política, sigue la lucha y estamos seguros que los pueblos del mundo tienen todo el derecho de liberarse”, señaló en un breve contacto con la prensa.
El líder indígena fue recibido por el canciller mexicano Marcelo Ebrard, quien en horas de la mañana detalló que el viaje de Morales tuvo una serie de complicaciones diplomáticas.
Morales llegó a suelo mexicano aproximadamente a las 13:15, hora boliviana, junto al vicepresidente Álvaro García Linera y la exministra de Salud, Gabriela Montaño, ambos obligados a renunciar ante la arremetida de grupos de choque contra su integridad y la de sus familias.
Varios países negaron permisos para sobrevuelo de avión donde viajaba Evo
El canciller mexicano Marcelo Ebrard manifestó este martes que en Bolivia hubo un golpe de Estado desde el momento que el ejército de ese país pidió la renuncia de Evo, razón por la que el Gobierno mexicano le extendió asilo político al mandatario.
El vuelo del presidente de Bolivia, Evo Morales, a México, se retrasó por cuestiones operativas y técnicas, que fueron resueltas a través de gestiones diplomáticas, en las que contribuyó el mandatario electo de Argentina, Alberto Fernández, reveló el canciller mexicano.
Ebrard señáló que “no creo que la vida de Evo Morales haya corrido peligro durante su traslado a México”, después que se arregló la vía para el viaje del líder boliviano, tras impedimentos que se presentaron para restablecer de combustible a la aeronave.
México garantizará la integridad de Morales durante su estancia en el país, indicó el canciller mexicano durante la tradicional rueda de prensa del presidente de México, Andrés Manuel López Obrador.
“La aeronave bajó en Lima Perú y tuvo que esperar para solicitar los permisos correspondientes, algo muy complejo por la situación y no se sabe quién decide qué”.
“Se otorgó el permiso y cuando llegaron a Bolivia les dijeron que no era válido y no podían llegar, tuvieron que retornar a Lima y esperar varias horas, pero gracias a la intervención de nuestra embajadora, subsecretario y un servidor gestionamos un permiso con el comando, lo que demuestra quién tiene la fuerza ahí”, declaró.
El Presidente Evo Morales es recibido por el Canciller de México, Marcelo Ebrard
El canciller detalló las complicaciones que hubo para poder salir de Bolivia con el ex mandatario ya que fue complejo conseguir la autorización de autoridades bolivianas para utilizar el espacio aéreo.
Afirmó que la negociación se logró con autoridades diplomáticas mexicanas y autoridades militares bolivianas, quienes dijo que visiblemente se ve que tienen el control en ese país tras la renuncia de Evo Morales.
Agradeció al presidente electo de Argentina por su gestión para conseguir el apoyo del gobierno de Paraguay para poder recargar combustible en Asunción.
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Ebrard afirmó que por seguridad, no se revelará el lugar donde Evo Morales tendrá su residencia en México; sin embargo, dijo que dependerá de él darla a conocer así como dar un informe del porqué de su decisión.
Aunque no se hizo una valoración médica del ex presidente de Bolivia, el canciller consideró que su apariencia debe ser de cansancio por todo lo que ha sucedido en su país.
En cuanto a la decisión de México, dijo que es un timbre de orgullo el otorgar el derecho de asilo a perseguidos políticos y es una tradición que debemos mantener.
“Este es un gobierno diferente y estamos actuando diferente. Sin duda alguna esto tendrá un impacto y marcará posiciones en Latinoamérica, donde México posiciona su liderazgo”, afirmó.
En cuanto a la relación con Estados Unidos, después del asilo otorgado a Evo Morales, explicó que hay una buena relación que no debe basarse en la sumisión, sino en le respeto, por lo tanto no se espera ningún reclamo sobre la posición que el gobierno mexicano ha tomado sobre dicho asilo.
Resalto la tradición mexicana de dar asilo a figuras políticas perseguidas. El derecho de asilo es proteger la vida de la personas que esta en peligro no hacer valoraciones de ningún tipo sobre procesos políticos internos de cada país, indicó.
México no hace valoraciones sobre los procesos de reelección en América Latina, por razones explícitas en su doctrina diplomática.
Entre tanto las reacciones de la izquierda local continúan expresando su rechazo a la salida de Morales por la fuerza y sus muestras de solidarias con el país plurinacional andino, víctima de un vil ataque a sus instituciones democráticas.
‘La coacción de fuerzas militares contra Evo Morales ha sido parte claramente de un golpe de Estado inaceptable para nuestro continente’, expresó la víspera en la red social Twitter, el expresidente Fernando Lugo (2008-2012), senador y líder el Frente Guasu (FG), concertación de la izquierda oposicionista.
