La apuesta por el turismo doméstico en lo que resta del año y primer semestre del próximo año marca la estrategia de la industria en Nicaragua, ratificó este miércoles la principal directiva del sector en este país, Anasha Campbell.
Tenemos un plan que va del corto al largo plazo, en el primer caso alcanzaría hasta junio de 2021 con un enfoque casi total hacia el turismo interno, seguido por una fase para potenciar el procedente de la región centroamericana, comentó la titular del Instituto Nicaragüense de Turismo (Intur), al intervenir este miércoles en la revista En Vivo del canal 4.
Tras precisar que el de los países vecinos representa históricamente el principal mercado emisor hacia Nicaragua, entre un 67-70 por ciento de los arribos, Campbell aventuró que la hora del turismo internacional llegará entre 2023 y 2025.
Uno de los temas más presentes en la actual agenda del Intur está relacionado con los protocolos de bioseguridad, imprescindibles para la reapertura de la industria en medio de un panorama marcado por la pandemia global de la Covid-19.
Es una tendencia mundial restablecer la confianza en el turismo y para ello es necesario la aplicación de medidas sanitarias, los protocolos de bioseguridad a implementar por los negocios turísticos, incluidos hoteles, restaurantes, transporte y los propios guías, insistió la directiva.
En el caso de Nicaragua especificó que ese programa de medidas está en revisión por parte de los ministerios de Salud y Trabajo y el Instituto Tecnológico Nacional.
La directora del Intur, con rango de ministra, destacó también la importancia que tendrán para la reanimación de la industria las medidas de flexibilización y restructuración de créditos anunciadas a principios de semana por el Banco Central de Nicaragua.