Managua. Nan McCurdy, NicaNotes
La semana pasada, el 13 de octubre, lanzamos una campaña para recaudar fondos de emergencia para apoyar los esfuerzos del gobierno de Nicaragua para reconstruir la infraestructura dañada y apoyar a los millones de personas gravemente afectadas por el huracán Julia. Puedes donar al Fondo de Solidaridad con Nicaragua “Padre Miguel D’Escoto Brockman”, un proyecto de Alianza para la Justicia Global (AFGJ), para ayudar a las víctimas del huracán.
El huracán tocó tierra en la madrugada del 9 de octubre en la Región Autónoma del Caribe Sur nicaragüense en las zonas de Bluefields, Pearl Lagoon y Tasbapounie. Siguieron lluvias torrenciales que devastaron gran parte del resto del país. Casi cuatro millones de personas en 123 municipios se vieron afectadas en algún grado. Las acciones del gobierno de evacuar a 20.000 personas y ubicar a 12.858 en 33 refugios fue clave para salvar vidas. El Dr. Guillermo González, Director del Sistema Nacional para la Prevención, Mitigación y Atención de Desastres (SINAPRED) señaló que “no se reportaron muertes a causa del huracán. Salvar vidas era la prioridad número uno”.
Los reportes iniciales de daños y pérdidas se estiman en US$400 millones de dólares, 2% del PIB, pero esa cifra es preliminar según Iván Acosta, Ministro de Hacienda de Nicaragua, dado los daños a la infraestructura y servicios básicos en zonas como El Rama, Pearl Lagoon y Bluefields aún se están calculando y las pérdidas en los sectores agrícola, pesquero y turístico a nivel nacional también siguen en estudio.
Equipos de especialistas están trabajando las 24 horas para restablecer los servicios básicos de comunicación, electricidad y agua. Paquetes de alimentos y materiales para techos están llegando a familias en El Rama, Bluefields, Corn Island y otros municipios de la Región Autónoma del Caribe Sur.
Esta es la segunda vez que se activa la recaudación de fondos para el alivio de huracanes.
En 2020, se recaudó dinero para los esfuerzos de ayuda y reconstrucción de los huracanes Eta e Iota. La Alianza para la Justicia Global/Nicaragua Network envió $27,500 a SINAPRED, la galardonada y muy reconocida agencia de prevención y mitigación de desastres del país.
El Fondo de Solidaridad con Nicaragua, establecido en 2020 a través de la AFGJ, es una oportunidad para que los ciudadanos estadounidenses apoyen las necesidades del pueblo nicaragüense en un momento en que Estados Unidos continúa violando el derecho internacional al imponer sanciones contra Nicaragua. Estas sanciones, en los últimos años, han impedido que Nicaragua acceda a préstamos en condiciones favorables, subvenciones o alivio de la deuda de fuentes multilaterales como el Banco Mundial, el Banco Interamericano de Desarrollo y el Fondo Monetario Internacional.
Cabe señalar, Estados Unidos aún tiene la responsabilidad moral y legal de cumplir con el fallo de la Corte Internacional de Justicia (Corte Mundial) de 1986. La República de Nicaragua vs. Estados Unidos de América fue un caso donde la Corte Mundial sostuvo que Estados Unidos había violado el derecho internacional al librar una guerra contra el gobierno de Nicaragua utilizando a los Contras para minar los puertos, matar a nicaragüenses y destruir escuelas, centros de salud, torres de electricidad y más. La Corte Internacional falló a favor de Nicaragua y en contra de Estados Unidos ordenando el pago de reparación a Nicaragua. Estados Unidos se negó a participar en el proceso luego que la Corte rechazara su argumento de que la Corte Internacional no tenía jurisdicción para conocer el caso. Estados Unidos también bloqueó la ejecución de la sentencia en el Consejo de Seguridad de Naciones Unidas, impidiendo que Nicaragua obtuviera compensación alguna.
Después que el Frente Sandinista entregara el poder en 1990, el Gobierno sucesor bajo Violeta Chamorro fue presionado por Estados Unidos para que retirara la demanda ante la Corte en 1992. En 1986, los daños a Nicaragua se calcularon en aproximadamente US$17 mil millones de dólares. Treinta y seis años de intereses acumulados hacen que el monto adeudado al país se aproxime ahora a US$160 mil millones.
Indudablemente el Fondo de Solidaridad con Nicaragua no reemplaza esta deuda de los Estados Unidos, pero ofrece una oportunidad para que los ciudadanos estadounidenses reconozcan la responsabilidad de su gobierno y ayuden al Gobierno de Nicaragua para responder a las necesidades de su pueblo.