Managua. Por Rosario Murillo, Vicepresidenta de Nicaragua
Cuando uno recibe tanta fuerza como la que recibimos en cada uno de estos actos, que de hecho son un homenaje al pueblo heroico de Nicaragua, uno se conmueve, pero se fortalece sobre todo porque fuerza es fuerza: “aquí nos ilumina un Sol que no declina”. Y eso lo sabemos y lo sentimos y vivimos y vibramos con la fuerza, la fortaleza de ese Sol, “el Sol que no declina”.
¡Cuánto espíritu en cada una de estas expresiones de la gallardía, de la valentía y del amor de nuestro pueblo! ¡Imagínense! 47 compañeros (caídos en 1987) allá en Siuna, en Bonanza y en Rosita. Y eso es una parte porque continuamente atacaron esas comunidades, esos barrios y la respuesta fue la misma. No pudieron pasar, como no podrán pasar jamás.
Esta es una Nicaragua que está bendecida por esa heroica entrega de tantos nicaragüenses que han dado la vida pecho al sol, para decir “aquí estamos y no nos moverán” como no nos han movido a lo largo de los años, de defensa de la soberanía, de defensa de la dignidad, de defensa de la alegría, de defensa de los derechos, de defensa de la paz.
Cuando hablamos de la soberanía, de la dignidad, de los derechos, hablamos del derecho del pueblo nicaragüense a vivir bien, a trabajar seguro, a estar tranquilo en las comunidades, en los barrios, en los hogares, y a trabajar para prosperar.
Y es lo que vamos logrando y lo vamos logrando porque ahí está la fuerza de cada nicaragüense que ha dado lo mejor de sí mismo, para que vivamos como merecemos vivir y para que la juventud pueda realizar su sueño y para que los niños tengan esperanza y para que las mujeres tengamos derechos plenos, seamos todos protagonistas de nuestro destino.
Este es un país de héroes, el pueblo entero es heroico. Unos cuantos serviles están donde tienen que estar: fuera de aquí. La mayoría del pueblo nicaragüense tiene la raíz en esta tierra que florece, que fructifica.
Somos nicaragüenses orgullosos de ser nicaragüenses y orgullosos de aprender cada día a convivir, a compartir y ser más solidarios, más íntegros, más enteros con todos nuestros derechos. Y sobre todo, sabiendo que esta tierra es nuestra, que este destino nos pertenece, el destino de ser prósperos, de progresar y de sentirnos tranquilos en nuestra propia tierra. Así decía Sandino. Y el que no reclama ese derecho, ¿cómo puede sentirse en nicaragüense?
Días bonitos lo que estamos viviendo: navidades, fin de año y la esperanza de un año que es cada vez mejor, además un tiempo que es cada vez mejor, porque lo hacemos mejor entre todos y por el bien de todos,
Actos de nuestra policía, de nuestros ejército, a todos nos hacen sentir cada vez más conscientes del orgullo que tenemos de contar con estos destacamentos que vienen del pueblo, de un pueblo libre, de un pueblo que ha dado todo para vivir tranquilo, vivir seguro, para vivir avanzando.
Todos los días también decimos: “gracias, Padre”. Al Padre Celestial, a nuestra Madre María, gracias porque con esa luz interior es que avanzamos con esa capacidad para vernos y sentirnos hermanos, familia, con esa capacidad para reconocernos como seres plenos y seres solidarios. La solidaridad es la base también de nuestro futuro mejor.
Hoy estamos aquí celebrando a tantos compañeros que se gradúan, celebrando que tenemos 19 comisionados generales, mujeres y hombres, celebrando que la Policía va avanzando en equidad de género. Hemos tenido a la comandante Doris Tijerino, como jefa de la policía en algún momento y cuánto debemos a tantas mujeres heroicas, como la Doris, como la Gladys y como tantas que dieron la vida y que nos iluminan como soles que no declinan
Policía, Ejército y un pueblo que sabe vigilar además. La comunidad es protagonista de la seguridad también. Por supuesto, que los cuerpos especializados como la Policía y el Ejército cumplen sus funciones. Pero la familia es protagonista también de la seguridad.
La próxima semana, el día 27, celebrando una acción heroica. ¿Ya hace cuántos años, desde 1974? Son 49 años. Ese día vamos a estar realizando el acto de cierre de año del Ministerio de Gobernación. Vamos a estar con los compañeros de Migración, los compañeros bomberos –que ahora tenemos estaciones de bomberos en todo el país, gracias a Dios, como tenemos comisarías de la mujer hasta más de tres en algunos municipios– y también el Sistema Penitenciario.
El viernes 22 van a estar 2 mil 200 personas reuniéndose con sus familias, después de un periodo en el que también ha aprendido, porque en el Sistema Penitenciario hay cursos de todo tipo: desde alfabetización hasta bachilleres hasta técnicos que van graduándose para contribuir a sus familias de mejor forma.
Fin de año, lleno de vitalidad. Celebramos también la inauguración de otro centro cultural que llevará el nombre del magnífico Tino López Guerra, autor de tantas canciones emblemáticas.
Nos sentimos orgullosos de cada uno de estos logros, de todos los centros técnicos, de todas las escuelas, las universidades en el campo. Son proyectos únicos de protagonismo de las familias. Y aquí todos los triunfos son del pueblo, esos son triunfos del pueblo nicaragüense que quiere vivir mejor y que quiere, además, tener ese futuro de prosperidad que merecemos.
Así que felicitaciones a todos, los graduandos, sus familias, sus comunidades. A los comisionados generales. A la Policía Nacional en general. Y felicitaciones a todo nuestro pueblo porque cada día avanzamos, cada día caminamos y desde la fe que tenemos en el Padre Celestial, sabemos que cada día y cada tiempo venideros será mejor.
