El académico y Presidente Ejecutivo del Centro de Estudios Regionales Internacionales, Manuel Espinoza, aseguró que en Nicaragua se intentó un golpe de estado suave, detallando que la violencia y protestas de los últimos tres meses no surgieron de la noche a la mañana, sino que fue el producto de una preparación de muchos años, comenzando con manipulación de la opinión pública, redes sociales, guerra psicológica y una matriz en la que se montaron movimientos políticos, sociedad civil, universitarios y hasta religiosos católicos… “Hemos auscultado documentos; hemos investigado mucho; monitoreamos; seguimos; para entender lo que ha pasado y en qué momento se dio este golpe rapaz, que fue planificado”, afirmó… Espinoza añadió que “aquí se han usado muchas mentiras, se ha desprestigiado los resultados del Gobierno y se ha calado el odio, objetivos claros de una guerra psicológica que es una nueva modalidad de guerra, por eso las posiciones radicalizadas”… “El patrón es el mismo, mentiras, desprestigio y generación de odio. Con financiamiento extranjero para desestabilizar el país y tumbar a un gobierno”, especificó…