Durante el acto de conmemoración de los 41 años
de fundación de la Policía Nacional, el presidente de la República, Daniel
Ortega resaltó que esta es una institución que por primera en la historia de
Nicaragua tiene raíces nacionales, “nacida de la voluntad soberana del pueblo
nicaragüense, que se manifestó, con toda claridad, aboliendo el 19 de julio de
1979 las instituciones armadas que habían sido instaladas, creadas, organizadas,
financiadas, entrenadas, por los gobernantes norteamericanos, para mantener una
política de intervención permanente en nuestro país”.
Rememoró las
rebeliones de los nicaragüenses y las intervenciones extranjeras aquí desde 1855
cuando los liberales trajeron al filibustero William Walker para ayudarles a
derrotar a los conservadores y recordó que Walker se declaró presidente de
Nicaragua e incluso fue reconocido por Washington que hasta le aceptó al
sacerdote Agustín Vijil como su embajador en la capital norteamericana, un
sacerdote católico que había bendecido la intervención extranjera.
Hizo
un repaso histórico de las luchas de los patriotas nicaragüenses contra varias
intervenciones extranjeras norteamericanas, desde Benjamín Zeledón a Augusto
Calderón Sandino y la creación de la Guardia Nacional de la mano de Estados
Unidos y su jefe, el padre de la dinastía somocista Anastasio Somoza García,
“ocupada a Nicaragua, sin ninguna Soberanía, sin ningún derecho para el pueblo,
promoviendo la riqueza para unos pocos, y la pobreza y el analfabetismo para la
inmensa mayoría de los nicaragüenses.
“Eso explica que cuando triunfa la
Revolución encontramos en Nicaragua, que, de cada 100 nicaragüenses 62
nicaragüenses no sabían leer ni escribir. Ese fue el resultado de la
intervención yanqui: pobreza, miseria, analfabetismo, para el pueblo. Y en la
batalla que el pueblo tuvo que librar, dándole continuidad a la batalla de
nuestro General Sandino, encabezada esa nueva batalla por el Comandante Carlos
Fonseca, quien levantó nuevamente la bandera de Sandino para rescatar la bandera
azuliblanco de la patria, que estaba humillada, que estaba sometida bajo la bota
del intervencionismo yanqui, eso dio lugar a que la Revolución no fuese
simplemente una toma del gobierno, sino que fue una toma del poder por el
pueblo, y es lo que permitió abolirla, desaparecer, a la Guardia creada por los
yanquis, que asesinó a miles de nicaragüenses, entre ellos a ese joven Ajax
Delgado, un 5 de septiembre del año 1960”, señaló.
“Y no había condena
contra estos crímenes, no aparecían los organismos que suelen aparecer como
instrumentos de políticas contra los pueblos que defienden la soberanía. No
aparecían esos organismos para condenar, para que se detuvieran esos crímenes,
campesinos asesinados, estudiantes asesinados, trabajadores”, cuestionó.
Anotó que “se produjo la derrota del instrumento de dominación que
tenían los yanquis aquí, la guardia y la policía, la misma guardia en ocasiones
desarrollaba actividades de policía. Y la Junta de Gobierno de Reconstrucción
Nacional, que encabezó el gobierno que surgió de la lucha del pueblo, de la
sangre derramada por el pueblo, del sacrificio del pueblo, esa Junta de Gobierno
firmó los Decretos donde quedaban abolidos, desaparecidos esos instrumentos de
terror y de muerte”.
“De ahí que nacieran, en esas circunstancias
históricas, desde el Corazón del Pueblo, nacieran, tanto el Ejército que en su
nacimiento se llamó Ejército Popular Sandinista, y la Policía que en su
nacimiento se llamó Policía Sandinista. Ejército Popular Sandinista, Policía
Sandinista. Sí, Sandino, el que había defendido, que había entregado su vida por
la soberanía de la patria enfrentando a las tropas invasoras. Por eso es que
también, en nuestra Constitución, Sandino está ahí, reconocido por la inmensa
mayoría de los nicaragüenses como un héroe nacional”, manifestó.
“¡Ahí
está Sandino! Algunos, lógicamente, que siguen siendo instrumento de la política
intervencionista, no lo reconocen, y si Sandino viviera quisieran montarle otra
emboscada como la que le montaron entonces, y asesinarlo nuevamente. Pero
Sandino está en la Policía, está en el Ejército, está en los campesinos, en los
trabajadores, en la juventud, en los estudiantes, en los técnicos, en los
profesionales; Sandino está en el corazón de Nicaragua, en el corazón de las
familias nicaragüenses. Y eso nos da la fortaleza y le da fortaleza, en este
caso a instituciones como la Policía Nacional”, indicó.
Subrayó que “la
lucha por la paz sigue siendo una lucha imprescindible para la humanidad, paz
para Nicaragua, pero paz también para todos los pueblos del mundo, muchos
pueblos que son sometidos, que son agredidos, que son discriminados, pueblos que
son bloqueados; pueblos a los que quieren exterminar con bloqueos brutales, como
el hermano pueblo de Cuba, el pueblo de Martí, de Fidel, de Raúl, de nuestro
Hermano Miguel Díaz-Canel, Presidente, al cual le hacemos llegar nuestra
solidaridad”.
“Siguen, siguen tratando de rendir a Cuba a través del
bloqueo. Igualmente, el bloqueo en contra del hermano pueblo de Bolívar, el
pueblo de Chávez, el pueblo de nuestro hermano Nicolás Maduro, el pueblo
venezolano, bolivariano, que está ahí librando una batalla heroica, donde
abiertamente, sin ninguna vergüenza, gobiernos que no aceptarían y no aceptan
que les apliquen lo que llaman sanciones, sí se prestan a sumarse cuando lo
ordena el imperio”, dijo y agregó que “el imperio norteamericano que no le basta
con oprimir al propio pueblo norteamericano, sino que también, como imperio,
busca cómo oprimir al mundo, al planeta, y en situaciones tan dramáticas como
esta que estamos viviendo frente a la pandemia, debería de haber una actitud de
racionalidad para entender, de una vez por todas, que el virus no solamente mata
a los pobres, sino que también mata a los más ricos”.
Se refirió
nuevamente a la epidemia del COVID-19 y al fracaso del modelo capitalista en
países desarrollados.
“Porque habiendo tanto egoísmo en el mundo, pero
también habiendo mucha sensibilidad y solidaridad en el mundo, cuando se
presentan catástrofes naturales, cuando se presentan catástrofes que tienen que
ver con epidemias que provocan la muerte de miles, de millones de habitantes de
los países en vías de desarrollo, es decir de América Latina, de Asia, de
África, hay quienes con un rasgo de solidaridad buscan cómo ayudar, cómo
contribuir a paliar; otras naciones muy comprometidas con la solidaridad, como
Cuba, como Venezuela, van de lleno, y otras naciones van de lleno a apoyar a
esos pueblos”, expresó.
“Pero, por otro lado, se sienten tranquilos en
sus países, porque sus países son países ricos y ven los problemas allá lejos,
ven el problema de las enfermedades matando a la población, lo ven allá en
África, en Asia, en América Latina. Hay que darles una alguna ayudita, y ahí que
sigan padeciendo. Estos países hoy están siendo afectados por esta pandemia y es
ahí cuando deberían ellos de dar el paso. ¿Para qué? Para combatir esta pandemia
y las que vendrán después, este virus y los que vendrán después, cuando se está
demostrando que no hay país, por rico que sea, que pueda asegurar la vida de sus
ciudadanos”, subrayó.
El mandatario nicaragüense consideró que “esto lo
que nos está indicando y les está diciendo a ellos, a los más poderosos, que
tienen los instrumentos para poder establecer un nuevo orden económico-social,
con justicia, en el mundo; les está diciendo que hay que aceptar de una sola
vez, que el modelo económico, por poderoso que ha sido, que ha dado capacidades
para que se multipliquen enormes fortunas, que ha dado lugar para que se
desarrollen carreras armamentistas, de que eso no puede detener estas pandemias,
estos virus”.
“Y que lo único que puede crear condiciones para enfrentar
este tipo de epidemia, es entender de una vez por todas que es necesario crear
un nuevo modelo económico que parta del principio de la equidad, de la justicia,
y en donde se priorice la salud para todos; que los recursos que se vuelcan, que
se disponen para la guerra, se dispongan para la vida. No corriendo solamente a
buscar una vacuna, como están haciendo ahora, sino creando condiciones de salud,
de atención a la población en los países en vías de desarrollo, en los mismos
países desarrollados, que les permitan entonces a nuestros pueblos enfrentar y
derrotar una epidemia, como esta que hoy todavía no ha sido derrotada”, remarcó.
Comentó que algunos países están reabriendo sus economías y restaurando
vuelos aéreos aun en medio de rebrotes de la epidemia como en Estados Unidos.
“Sí, Estados Unidos ahorita, hoy mismo tirando alerta roja en la
Florida, porque se está multiplicando la epidemia, en la Florida, y también en
Texas, dos puntos que han estado afectados en estos días. Esto no significa que
no esté también la pandemia manifestándose en otros Estados, pero no
reproduciéndose con la velocidad que se está reproduciendo, en este caso, en
Texas y en la Florida. Igual pasa con los países europeos, que han intentado
apertura y de repente tienen que ir nuevamente a cerrar, y no es posible en
estos momentos lograr que en el mundo funcione la economía como venía
funcionando hasta antes de la pandemia”, señaló.
Observó que “aunque
tengamos desempleo en los países centroamericanos, que tienen que ver con la
pandemia; que aquí tengamos también algún desempleo, provocado por el terrorismo
de abril del año 2018, y nos veníamos recuperando, ya nos veníamos normalizando
y estábamos punteando en la economía centroamericana, y nos cayó la pandemia.
Pero en estas circunstancias hemos aplicado las normas fundamentales que hay que
aplicar para enfrentar la pandemia, pero sin cerrar los espacios para las
actividades productivas, para el emprendimiento, para la cultura, guardando
lógicamente las medidas que ordenan las autoridades de salud”.
Llamó la
atención que, si bien en la región tenemos desempleo provocado por la pandemia,
ahora el mayor desempleo está en los países desarrollados.
“¿Qué
significa eso? No tenían, no encontraban camas en los hospitales, ahí en los
Estados Unidos, en Países europeos no encontraban, en la primera etapa de la
pandemia no encontraban, no encontraban los aparatos para poder atender la
cantidad de casos que estaban llegando en estado grave. O sea, ya ahí el poderío
económico, el modelo económico estaba demostrando una enorme y grave fragilidad,
que ponía en riesgo no solamente la vida de los ciudadanos de los países
desarrollados, sino que también ponía en riesgo el empleo, la economía de los
países desarrollados. Aquí algunas empresas se vieron obligadas a reducir
actividades, bueno, somos países pequeños, no tenemos la gran economía que
tienen ellos; pero en los países europeos, en los Estados Unidos, millones de
millones de familias han quedado en el desempleo, centenares de fábricas han
sido cerradas, y es la fecha y cuando parecía que ya venía superando esta
epidemia, todavía no logra ser superada ni logra ser controlada la epidemia”,
señaló.
Se refirió a los problemas en los ensayos médicos
del laboratorio AstraZeneca en la fabricación de la vacuna contra el COVID-19 y
la lucha en el mundo por estabilizarse.
“Entonces esa es la situación
actualmente en el mundo, y para enfrentar una situación como esta lógicamente en
primer lugar se necesita paz, estabilidad. Paz y estabilidad que permitan que el
país logre caminar, como venimos caminando; es decir, que logremos desarrollar
actividades económicas, actividades productivas que logren garantizar la
alimentación del pueblo nicaragüense; que se logre garantizar la educación, la
salud, como lo hemos venido haciendo, y es importante aquí el mensaje de la
paz”, precisó.
“La Policía está para enfrentar lógicamente a los que
agreden a la población, de una u otra forma, ¿para qué? Para garantizarle la paz
a la población. El Ejército está preparado para garantizar la soberanía del
país, la autodeterminación del país, frente a aquellos que quieran atentar
contra la soberanía y la autodeterminación del país”, señaló.
Dijo que
los productores están volcados por ello a sus actividades productivas, “tanto
las actividades productivas tradicionales, como las actividades productivas no
tradicionales” y “cómo vemos a los campesinos atentos, recibiendo más
conocimiento y recibiendo algunos insumos para mejorar el rendimiento en sus
actividades productivas, de plátano, de arroz, de legumbres”.
“Vemos a
los jóvenes capacitándose también, y van con su protección a la capacitación. Y
se hacen capacitaciones también ya a nivel regional y más allá de la región. Es
decir, este es un pueblo que no se ha quedado paralizado frente a este problema
de la epidemia, sino, bueno, a enfrentar la epidemia con los cuerpos médicos,
con las medidas de protección que hay que asegurar, pero a seguir luchando por
la vida, por el trabajo. Y el turismo, el turismo se ha afectado en el mundo…
¡Si no hay vuelos! Tienen que hacer vuelos especiales para poder de repente
hacer un viaje, reunir un grupo de gente que quiera volar, porque no todo mundo
quiere volar a lugares donde se dice que está mucho más fuerte la epidemia”,
comentó.
El presidente Ortega dijo que aquí ha habido algunos vuelos
internacionales hacia Estados Unidos, Europa, México, trasladando a ciudadanos
de otros países y también ciudadanos nicaragüenses.
“Estamos hablando de
varios centenares en esos vuelos, yo diría que más de 1,000 nicaragüenses han
salido en estos vuelos; pero también viene vuelos con pasajeros que vienen a
quedarse un rato en Nicaragua, vienen a visitar o vienen en búsqueda de alguna
iniciativa; nicaragüenses que retornan, y otros que salen”, dijo, recordando que
miles de compatriotas han retornado al país desde Panamá de forma ordenada y
segura.
“¿Y aquí qué es lo que hemos logrado frente a esa situación?
Aquí teníamos un flujo turístico muy bueno, un flujo turístico terrestre, aéreo
y marítimo, porque venían también los Cruceros. ¡Todo eso no está funcionando!
No puede haber turismo terrestre porque están cerradas las fronteras, las
fronteras se abren nada más para el tránsito de mercancías, el comercio.
Entonces, ¿qué hemos hecho? Bueno, promover entre nosotros mismos los
nicaragüenses, conozcamos Nicaragua. Porque es normal, a todo mundo le gusta
salir en momentos de vacaciones con lo que se ha logrado ahorrar, nos gusta ir a
otro país, y muchas veces no conocemos nuestro país, pero se ha promovido, y
esto ha permitido que esté creciendo el turismo nacional en lugares emblemáticos
donde antes esos lugares estaban llenos más de ciudadanos que venían de otros
países, y le costaba a un nicaragüense encontrar alojamiento porque ya con
tiempo habían logrado reservar en esos lugares los ciudadanos de otros países.
Ahora no, ahora en esos lugares están familias nicaragüenses; es decir, estamos
haciendo esa lucha”, manifestó.
“¿Qué es lo que se puede hacer? No se
puede forzar al turismo, ni se puede declarar el turismo. No podemos decir,
hágase el turismo y el turismo se va a hacer. Simplemente el turismo, en sus
condiciones anteriores, va a retornar cuando desaparezca esta pandemia y se
tomen medidas en el mundo que permitan caminar hacia un mundo más justo y más
seguro”, indicó.
Felicitó y reconoció a la Policía Nacional porque en
Nicaragua se mantiene la paz a favor de la población y porque no tenemos
pandillas o maras como en otros países que extorsionan a las familias en los
barrios.
“Aquí han intentado instalarse esas Maras, y se les ha
capturado a Jefes de Maras que han intentado instalarse aquí en Nicaragua. Sería
una situación caótica. Pero gracias a Dios, y es reconocido en el mundo la
seguridad, la estabilidad que tiene nuestro país. Y como el esfuerzo de la
Policía y el Ejército son fundamentales para garantizar esta paz y esta
estabilidad”, resaltó.
El jefe de Estado destacó que en Nicaragua la
mayoría de la población quiere paz.
“Claro que quiere paz. Hay siempre
una parte de la población que no quiere paz, no entienden que los ciclos de
enfrentamientos, de guerras, ya pasaron, y se superaron finalmente con acuerdos
de paz, aquí en toda la región centroamericana, en El Salvador, en Guatemala, en
Nicaragua. Es gente que está todavía aferrada a lo que es una mentalidad
totalmente conservadora, se quedaron en el pasado y quieren reeditar las luchas
del pasado. Eso no es posible. Más bien se convierte en un factor de estar
sembrando inestabilidad en la población, entonces la gente se molesta, dice:
Bueno, que nos dejen trabajar en paz, que nos dejen trabajar con tranquilidad”.
Reconoció y agradeció el trabajo que realizan los médicos del Hospital
Carlos Roberto Huembes de la Policía Nacional.
“O sea, el esfuerzo de
los médicos del Hospital Militar, de los médicos y enfermeras del sistema
nacional de salud, es una tarea de paz; mientras otros andan con el odio, con el
discurso de la muerte, con el discurso de la inestabilidad. Quieren sembrar
inestabilidad”, afirmó.
“Nicaragua es un país que tiene una población en
su mayoría cristiana, unos católicos, otros evangélicos, pero en la mayoría
Cristo es el símbolo, y Cristo dijo: “Ama a tu Prójimo como a ti mismo”, así de
sencillo, así lo dijo: “Ama a tu Prójimo como a ti mismo”. La paz que tendríamos
aquí en Nicaragua, si actuáramos todos de esa manera. “Ama a tu Prójimo como a
ti mismo”, la paz que tendríamos en el mundo, si actuáramos de esa manera, pero,
desgraciadamente, hay quienes son sembradores de cizaña, andan sembrando la
cizaña, como bien lo señala Cristo. ¡Son sembradores de cizaña! Donde estamos
sembrando paz, vienen los sembradores de cizaña, y ahí es donde diríamos,
repetiríamos todos los nicaragüenses: Señor, haznos un instrumento de paz a
todos los nicaragüenses, independientemente de ideología, independientemente de
religión, más aún si todos nos decimos cristianos”, apuntó.
“Bueno,
Señor, haznos instrumento de paz, donde haya odio, sembremos amor y no andemos
sembrando odio. Eso es lo que tendríamos que predicar y poner en práctica, que
es el desafío más grande que tiene una persona de fe. Fe en Cristo,
independientemente a la Iglesia que pertenezca. Y ese es el llamado que hacemos
en estos días en donde suficiente dolor ha provocado la pandemia y sigue
provocando la pandemia en el mundo y aquí en Nicaragua, como para venir a seguir
sembrando odio, sembrando la cizaña”, exhortó.
Concluyó su mensaje
asegurando que “el pueblo nicaragüense en su inmensa mayoría respeta y coopera
con la Policía Nacional en la lucha por la paz de las familias nicaragüenses, y
que tenemos que ir adelante, garantizando la seguridad en todos los campos” y
“garantizando que Nicaragua siga siendo un muro de contención frente al
narcotráfico, el crimen organizado, el terrorismo. ¡Que no avancen esas
pestes!