Ciudad de México. Agencias.
El Gobierno de México ha pedido suspender a Ecuador de la ONU por el asalto a su embajada en Quito en la denuncia ante la Corte Internacional de Justicia (CIJ) que ha presentado este jueves.
Los pormenores de la acusación fueron dados a conocer durante la habitual conferencia de prensa del presidente Andrés Manuel López Obrador.
“Hemos decidido llevar a Ecuador a rendir cuentas por su flagrante transgresión a la inviolabilidad de la embajada, así como por los ataques físicos perpetrados contra nuestros diplomáticos, contra su integridad física y moral”, afirmó la canciller mexicana Alicia Bárcena al presentar la denuncia.
“Esta demanda se sustenta en la convicción de que el uso de la fuerza no es el mecanismo, es la paz, es el diálogo”, dijo. Agregó que México ha sido pionero en el diseño y desarrollo del derecho internacional. “Eso es lo que fundamenta nuestra presentación, las herramientas de México siempre son la razón y la ley, esa es la ruta de nuestros pasos”, señaló.
En la querella, México ha exigido “la suspensión de Ecuador como integrante de la Organización de las Naciones Unidas en tanto no se emita una disculpa pública, reconociendo las violaciones a los principios y normas fundamentales del derecho internacional”, según ha expuesto la canciller Bárcena.
Asimismo, la Bárcena ha exigido “juzgar y declarar que Ecuador es responsable del daño que las violaciones de sus obligaciones internacionales han causado y siguen causando a México”. Esta petición se encuadra en el marco de la irrupción de fuerzas ecuatorianas en la Embajada mexicana el viernes, lo que derivó en la suspensión de relaciones diplomáticas.
En la denuncia el Gobierno de México acusa a Ecuador de violar la Convención de Viena por allanar la embajada y agredir a personal diplomático para llevarse por la fuerza al exvicepresidente ecuatoriano Jorge Glas, resguardado en el recinto desde diciembre mientras afrontaba un proceso penal por corrupción.
“Hoy, al amparo del ordenamiento jurídico internacional y sirviéndonos de la ley, hemos decidido por instrucciones del señor presidente [López Obrador], llevar a Ecuador a rendir cuentas por su flagrante transgresión a la inviolabilidad de nuestra embajada”, ha declarado Bárcena.
Los puntos de la demanda
“(Hay que) juzgar y declarar que, en caso de una violación de los principios de la carta de Naciones Unidas similar a la que cometió Ecuador, la Corte Internacional de Justicia es el órgano adecuado judicial para determinar la responsabilidad de un Estado e iniciar un proceso de expulsión”, propuso.
El objetivo, añadió, es establecer el precedente de que cualquier Estado o nación que actúe como lo hizo Ecuador será expulsado de la ONU.
“Es tan importante evitar la repetición de estos casos que el Tribunal Internacional de Justicia podrá presentar la expulsión del Estado que viole el derecho internacional de manera rápida y expedita ante el Consejo de Seguridad de la ONU, evitando el veto de sus miembros”, ha establecido la canciller.
La proclama de México, según ha agregado Bárcena, “es que el sistema multilateral debe estar a la altura de la gravedad de los hechos”, por lo que el Gobierno demanda “que la justicia y el sistema internacionales condene y sancione sin ambigüedades las graves violaciones ocurridas y se evite un precedente de impunidad”.
Que no se repita
López Obrador ha argumentado que lo “que se busca es que no se repita un hecho deleznable como el que sufrió, padeció México”. “Que no se repita en ningún país del mundo, que se garantice el derecho internacional, que no se violen los locales, las embajadas de los países, en ninguna nación”, ha señalado.
El mandatario ha indicado que “pueden acompañar otros países de manera voluntaria esta denuncia” y se pueden “adherir para buscar la solidaridad internacional, porque es un asunto de todos, no nada más de México”.
El presidente ha destacado la resolución de la Organización de Estados Americanos (OEA), aprobada el miércoles solo con el voto en contra de Ecuador y la abstención de El Salvador, que condena “enérgicamente” la irrupción de la Policía ecuatoriana en la embajada mexicana.
“En esta circunstancia ha quedado de manifiesto que todos los países están apoyando a México y es también el momento para que México, como se está haciendo, encabece un movimiento mundial para dar protección a los diplomáticos y para hacer valer, reforzar el derecho internacional”, ha concluido López Obrador.
Por otro lado, Bárcena pidió el martes en una reunión extraordinaria de la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños (Celac) que se sumen a la demanda de México ante la CIJ.