Daniel Ortega y Rosario Murillo, FORMULA PRESIDENCIAL 2016

Un reconocimiento a la mujer y la equidad de género, destaca el lider sandinista

El Presidente Daniel Ortega, candidato presidencial por el FSLN para las elecciones generales de noviembre, se inscribió esta tarde ante el Consejo Supremo Electoral con Rosario Murillo, como su fórmula presidencial, destacando su escogencia como un reconocimiento a la mujer Nicaraguense y para contribuir a la equidad de género.

Esto ha sido producto de la llamada Ley 50-50, que obliga a los partidos políticos a incluir en sus listas de candidatos a cargos de elección popular a igual cantidad de hombres y de mujeres.

A las 5:30 de la tarde de hoy, el mandatario llegó al CSE, junto con Rosario Murillo y fue recibido por los magistrados en pleno del Poder Electoral.

El representante legal del FSLN, Edwin Castro firmó el documento de inscripción de la candidatura y la entregó a los magistrados como manda la Ley Electoral.

Rivas explicó que con el FSLN, son 7 las alianzas y partidos que participarán en las elecciones en noviembre. Recordó que se han realizado desde 1984, 17 procesos electorales ininterrumpidos en el país.

Castro anunció entonces la inscripción de la candidatura presidencial José Daniel Ortega Saavedra– Rosario María Murillo Zambrana.

Rivas prometió realizar un proceso electoral justo y transparente que sea digno de los procesos electorales en América Latina.

El candidato presidencial sandinista, recordó como en las elecciones de 1984 dieron paso al pluralismo político que así sigue vigente en la Constitución Política aprobada en 1987 y que después fue objeto de reformas en 1995 y el 2000.

Recordó que en 1996 hubo irregularidades en las elecciones en donde se declaró ganador al liberal Arnoldo Alemán, pero varios entonces presidentes latinoamericanos como Oscar Arias le pidió que aceptara la derrota por la paz de Nicaragua y acataron los resultados. Posteriormente en el 2001 cuestionaron las elecciones, pero los sandinistas acataron.

Aseguró que siempre se mueven intereses en identificación con algunos sectores y que al final lo que es fundamental es el voto de la población.

Sobre las elecciones de noviembre, comentó que como Jefe de Estado su deber es garantizar la paz y la estabilidad y que el proceso electoral camine de la mejor manera posible, asegurando que en ninguna parte del mundo existen sistemas perfectos, ni siquiera en la religión, y ahora con un CSE con alto grado de magistradas mujeres, ofreció todo el apoyo del Estado para que estas elecciones sean un éxito.

Resaltó que la inscripción de otros partidos y alianzas demuestra el pluripartidismo que existe en el país y que el CSE tiene una gran responsabilidad de enfrentar poderes externos que solo se satisfacen cuando ganan sus fuerzas políticas y pierde el FSLN, como en 1990, recordando en 1996 y 2006 todo era elogio para el Magistrado Presidente del CSE, Roberto Rivas. Aseguró que eso es un derecho de libertad de palabra y pensamiento porque es un derecho de los seres humanos.

Dijo que este proceso electoral del 2016 debe ser un proceso que le de confianza a los nicaragüenses y que escojan libremente.

Luego de conversar con los magistrados del CSE durante 20 minutos, la fórmula presidencial salió a las afueras del CSE en donde los esperaban simpatizantes y militantes del FSLN que los vitoreaban y aplaudían, sobre todo centenares de jóvenes de la Juventud Sandinista.

Ahí el mandatario dijo que entre el quehacer de una revolución están los compromisos sociales, el compromiso con los pobres, los oprimidos de la tierra y eso significa garantizar derechos, como el derecho a la tierra para los campesinos, una vivienda digna para las familias, derecho a la salud y la educación y quienes forjan y construyen ese proceso es el pueblo y el pueblo está sólidamente integrado por hombres y mujeres.

Aseguró que desde hace 37 años se asumió el compromiso de incorporar a la mujer al quehacer, el protagonismo y los cambios, no solo como un punto de apoyo doméstico, sino la mujer como protagonista en un mundo machista en donde las labores del Estado en sus diferentes instituciones le ha sido asignada históricamente a los hombres.

Expresó que otro desafío es la incorporación de la juventud como protagonista, actora y autora de los cambios en el país.

Al recordar que el FSLN llegó de nuevo al gobierno en el 2007 encontraron un índice bajo de participación e incidencia de las mujeres en los cargos de decisión en el Estado, y ahora 2016, hay 9 mujeres de Ministras de Gobierno, pasado del 16.66% en 2006 al 56.25%, un salto de calidad en el gobierno. Además, hoy tenemos 6 viceministras un 37.5% en el estado, pero se quiere llegar al 50% de equidad de género en el gobierno.

Señaló que en la CSJ hay ahora 5 magistradas para un 31.25%; CSE, había en 2006 un 42.85% de mujeres magistradas y en el Parlamento de 20 mujeres diputadas ahora se cuenta con 39 mujeres diputadas, el 43.39%, y se espera llegan al 50% de mujeres diputadas con la nueva ley para las elecciones de noviembre. Solo el FSLN tiene 39 mujeres diputadas que pasa del 50% de diputadas sandinistas mujeres. En el 2016 tienen ahora el FSLN 60 alcaldesas de 151 municipios.

Explicó que esto es un asunto de fondo que rompe una estructura machista en el país, aunque falta mucho por avanzar para que las mujeres se incorporen plenamente a todas las tareas que la sociedad demanda y para ser consecuentes solo faltaba una vicepresidenta del país, un compromiso asumido desde el 2007 y por ello ahora en el gobierno hay co directores, un varón y una mujer.

Resaltó que él no dudó en elegir a una mujer como Vicepresidencia en Rosario Murillo, a la cual reconoció su eficiencia y capacidad de trabajo a tiempo completo y sin horario.

Aseguró que Murillo será la candidata a la vicepresidencia en representación de las mujeres nicaragüenses.

Reiteró el apoyo al poder electoral para las elecciones, asegurando que los jueces no les caen bien a todos.

Dijo que el FSLN nunca ha rehuido a ninguna elección desde 1984 y en desventajas, y cuestionó que algunos observadores buscan solo aquellas elecciones en donde el FSLN pierde y si las gana hay que quitarle legitimidad.

Consideró cinismo que en 1996 pese a las irregularidades se le pidió de parte de Oscar Arias que aceptara los resultados y entonces todos aplaudían al CSE y todos los poderes extranjeros y de Nicaragua apoyaban los procesos en 1996 y el 2001, porque el FSLN perdía las elecciones aun que las cuestionara.

Dijo que el FSLN aguantó todos los años de los gobiernos de Violeta Chamorro, Arnoldo Alemán y Enrique Bolaños haciendo una oposición constructiva y dando las batallas políticas y avanzando, confiando en el pueblo.

Llamó a la base sandinista a no descuidar los trabajos en el gobierno y el servicio al pueblo, con la seguridad que este es un gobierno que continuará trabajando hasta erradicar la pobreza y el hambre en Nicaragua, bajo los principios de cristiano, socialismo y solidaridad, y hoy más que nunca se tiene que defender la estabilidad, la paz y la seguridad de todos los nicaragüenses.

En sus primeras palabras como candidata a Vicepresidenta por el FSLN, Murillo dijo que se debe seguir trabajando porque las mujeres en Nicaragua sigan teniendo protagonismo, liderazgo e influencia en todos los campos, y que no sea una simple representación, sino en confiar más en la capacidad, potencial, sensibilidad e inteligencia de las mujeres nicaragüenses que son batalladoras y trabajadoras en todos los ámbitos.

Dijo que aspiran al protagonismo pleno de todas las mujeres en Nicaragua y que las mujeres tienen derecho de decisión y de participación en los cargos de elección popular y en el estado, para lo cual es fundamental que las mujeres tengan confianza en ellas mismas.

Aseguró que es la revolución la que reconoce el liderazgo y la capacidad de las mujeres que permitió la visibilidad de las mujeres, demostrando que ya tuvimos una mujer Presidenta como Violeta Chamorro y una vicepresidenta como Julia Mena, gracias a la revolución sandinista que existe y en la que las mujeres participan y le dan pleno protagonismo y debe seguirse fomentando.

Nicaragua ocupa en el mundo el sexto lugar entre los países que han venido reduciendo la brecha de género entre hombres y mujeres, y el primero en América Latina, según el Fondo Económico Mundial, conocido por sus siglas en inglés como WEF, donde se indica que Nicaragua es líder en paridad de género en América Latina y el Caribe.

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *