El Presidente de la República, Daniel Ortega, dijo anoche en el acto de celebración del 37 aniversario del Ejército de Nicaragua, que en las elecciones del 6 de noviembre próximo será el voto del pueblo nicaragüense el que determinará los resultados de dichos comicios.
Así parecía responder el jefe de estado a las críticas de organismos internacionales, organismos de derechos humanos, comentaristas y editorialistas de periódicos extranjeros y un sector de la oposición política que desde ya han tratado de deslegitimar el proceso electoral y sus resultados e incluso demandan nuevos comicios.
“Hoy más que nunca tenemos que cuidar la paz, la estabilidad para seguir avanzando en la lucha contra la pobreza, contra la extrema pobreza, seguir avanzando en esa lucha y seguir fortaleciendo el entendimiento con los diferentes sectores, fuerzas económicas, sociales de nuestro país”, expresó.
“Estamos en una nueva jornada electoral. El Ejército tiene una gran responsabilidad en acompañar estas tareas, todo el Estado nicaragüense está de lleno también respaldando esta tarea, y estamos seguros que este proceso electoral tal y como se viene llevando se va a culminar también en paz, sin confrontaciones, sin violencia, sino que en paz y definiéndose al final de cuenta con el voto. El voto es el que va a definir los resultados de estas elecciones que se llevarán a cabo el 6 de noviembre de este año 2016”, resaltó.
Aprovechó para hablar de la injerencia de Estados Unidos en los asuntos internos del país en el pasado y la intervención militar, recordando que el día del Ejército se celebra el 2 de septiembre, porque precisamente ese día, pero de 1927, fue que el General Augusto C. Sandino quien firmó el acta constitutiva del Ejército Defensor de la Soberanía Nacional y se opuso a la intervención norteamericana en nuestro país.
Subrayó que esta fecha también simboliza el que Sandino retoma las batallas gloriosas que se libraron en septiembre durante el siglo XIX contra el expansionismo yanqui, destacando de entre todas estas la Batalla de San Jacinto.
Ortega recordó además que durante esa época un filibustero como William Walker llegó hasta proclamarse Presidente de Nicaragua, lo que motivó a otros países centroamericanos a unirse a la causa hasta expulsar de la región a los filibusteros.
Señaló el líder sandinista que Walker fue traído al país a pedido de un grupo de nicaragüenses, que califica de peleles, cuando en Nicaragua funcionaba la Ruta del Tránsito entre Río San Juan, el Lago Cocibolca y Rivas para trasladar a los ciudadanos estadounidenses desde la costa este a la costa oeste.
Sin embargo, luego de recordar esa historia, se pronunció por buenas relaciones de respeto con Washington.
Trajo a colación que en la cumbre presidencial de Trinidad y Tobago (2009), le planteó al Presidente estadounidense Barack Obama la necesidad de nuevas relaciones con América Latina y el Caribe.
En este sentido, dijo que la región tiene su propia responsabilidad para lograr construir relaciones respetuosas, libres de guerras, de conspiraciones y terrorismo de parte de Estados Unidos.
“Ambas partes tenemos la responsabilidad de construir este nuevo tipo de relaciones”, apuntó.
“Nosotros hemos venido haciendo esfuerzos por construir ese nuevo tipo de relaciones con los Estados Unidos de Norteamérica”, subrayó y recordó que luego del derrocamiento de la dictadura somocista en 1979, él como Coordinador de la Junta de gobierno viajó a Naciones Unidas en Nueva York y se entrevistó con el entonces presidente norteamericano Jimmy Carter, quien demostró su buena disposición de establecer un nuevo tipo de relaciones con Nicaragua. Sin embargo, lamentó que Carter estuviera en la etapa final de su mandato y en una situación política muy frágil producto de la crisis de los rehenes en Irán.
Dijo que durante el encuentro conversaron de temas económicos, sociales y la compensación que Estados Unidos debería brindarle a Nicaragua luego de tantas guerras. Ahí le planteó al mandatario estadounidense que Nicaragua no contaba con Ejército y que necesitaba apoyo para armar a las nuevas fuerzas armadas, a lo cual Carter adujo que para él era muy difícil aprobar ese tipo de ayuda a nuestro país, aun cuando Estados Unidos sí mantenía el apoyo a diferentes tiranías.
Aprovechó el mandatario para comparar y resaltar la cooperación y solidaridad incondicional por parte de Rusia.
Observó que en estos nuevos tiempos, Nicaragua le ha pedido a Estados Unidos medios para luchar contra el narcotráfico y el crimen organizado, pero que estos siguen siendo muy conservadores, aunque sí se ha avanzado en cooperación y colaboración contra estos flagelos.
No obstante, indicó que Nicaragua busca cómo fortalecerse para apoyar a los países afectados por la violencia en el Triángulo del Norte, ello sin solicitar un sólo dólar de los 750 millones que Estados Unidos ofreció a esos países.
Resaltó que las fuerzas armadas de Nicaragua cuentan con el presupuesto más bajo de toda la región centroamericana y aun así se han convertido en un muro de contención al narcotráfico y al crimen internacional.
“Nosotros siempre le hemos tendido la mano a los Estados Unidos”, dijo, agregando que por tanto espera que las relaciones que se han venido forjando puedan fortalecerse aún más.
Refirió que Nicaragua trabaja conjuntamente con Estados Unidos como con Rusia.
“Estamos dispuestos a trabajar con todos aquellos países que tengan la voluntad de trabajar con Nicaragua en esta batalla por la paz, por la seguridad, por la estabilidad de nuestro pueblo”, expresó.
Durante este acto, el Comandante en Jefe del Ejército de Nicaragua, General de Ejército Julio César Avilés, aseguró durante el acto del 37 aniversario de constitución de las fuerzas armadas, que la seguridad, a la cual ha contribuido decididamente la institución castrense, nos da estabilidad, tranquilidad y Paz.
“La seguridad nos da estabilidad, tranquilidad y paz. Paz no es ausencia de guerra, la paz es la garantía de todo un pueblo y de su derecho a vivir seguro con estabilidad y tranquilidad. La paz es condición estratégica para el desarrollo nacional; desarrollo nacional que en Nicaragua está generando más y mejores empleos. Desarrollo nacional que nos da mayor acceso a la educación, la salud, vivienda, a carreteras y la dicha de ser testigos de las grandes transformaciones en este gran momento de la Patria”, aseguró Avilés.
“Los nicaragüenses estamos dando a la región y al mundo un ejemplo de cuánto podemos hacer consensuando nuestras metas y propósitos. La alianza entre gobierno, trabajadores y empresarios nos da el espacio para avanzar por el camino correcto para el bienestar de todos los nicaragüenses. Los miembros del Ejército de Nicaragua estamos comprometidos con el desarrollo nacional y haremos lo que esté a nuestro alcance para contribuir en esta ruta estratégica”, manifestó.
Avilés dijo que el compromiso del Ejército es apoyar el avance del país en las rutas de estabilidad, tranquilidad, seguridad y paz, que son condiciones indispensables para el desarrollo nacional.
Destacó de manera general que durante el último año, el Ejército brindó más de 420 mil servicios operativos terrestres; la fuerza naval navegó más de 100 mil millas; y la fuerza aérea realizó más de 600 horas de vuelo.
En el ámbito de la seguridad y la lucha contra el narcotráfico y el crimen organizado, resaltó la efectividad de la estrategia de muro de contención. Detalló que se logró la captura de más de 4 mil 800 kilos de droga, de esos 4 mil 735 son de cocaína. Se capturaron 135 narcotraficantes, 55 medios de transporte, un medio aéreo y 29 navales. Se incautaron más de 2 millones 700 mil dólares y más de 3 millones 25 mil córdobas; también se detuvo a más de 13 mil 500 migrantes ilegales.
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